Río Bravo es como las madres, no hay más que una.
Obra maestra. Podría quedarme con estas dos palabras para definir esta película, pero me apetece hablar de esta joyita, de los mejores western de la historia y de las mejores películas en general. ¿Por qué me gusta tanto? Por muchas cosas:
1. Por el arranque espectacular que tiene, sin una sola palabra, ni falta que hace.
2. Por los actores, John Wayne en el papel de sheriff, Dean Martin de amigo borracho enamorado al que Wayne ayuda a salir de la crisis, Walter Brennan de viejo cascarrabias tullido con el que te partes, Ricky Nelson de joven inexperto pero valiente y Angie Dickinson poniendo malito a todo el personal con su físico e inteligencia.
3.Por como está dirigida por Howard Hawks, dos horas largas de película, en las que los pocos escenarios que salen son la comisaría, la calle, el saloon y poco más. En este espacio y en este tiempo se desarrollan escenas cotidianas, ir a por comida, hacer la ronda, dar un paseo, unas conversaciones, tocar la guitarra... todo contado de una forma amena y manteniendo en vilo al espectador.
4.Por las dos canciones que se marcan al alimón Dean Martin y Ricky Nelson, magnificas voces acompañadas por Walter Brennan, que hará que más de uno se tronche de la risa.
5.Por la música de Dimitry Tiomkin, para variar.
6.Porque en esta película John Wayne no es su personaje, John T. Chance, sino John Wayne. Un tipo duro, sí, pero también un amigo de verdad (por no dejar que Dean Martin siga sumido en una profunda crisis personal), un profesional que intenta cumplir con sus obligaciones, y por qué no, un ligón, a pesar de ser muy feo.
sigue en el spoiler...
Ahora quiero aprovechar esta crítica para hablar de uno de los actores más defenestrado por cierto sector pseudointelectual que desprecian a John Wayne por ideas políticas.
Muchos son los detractores de Wayne, no porque fuera mal actor, cualquiera medianamente avispado puede darse cuenta que, a pesar de no tener el talento interpretativo de Marlon Brando, Laurence Olivier o Peter O’Toole, por citar a alguien, era un actor como la copa de un pino. Los detractores de Wayne le acusaban de racismo. Bien. Yo quiero romper una lanza en su favor. La acusación de racismo es totalmente infundada. Algunos dirán que Wayne mataba en sus películas a cientos de indios, o que tenía amigos políticos de la ultraderecha americana, cierto, pero no menos cierto es que Wayne tuvo 3 esposas, las 3 eran mejicanas y también tenía muchos amigos mejicanos y negros, como el actor Woody Stroode, compañero en muchas películas. Era amante de Méjico y Panamá, donde compró una isla llamada Taborcillo. Es extraño que algunos blancos le tachen de racista, cuando el emperador Hiro-hito era un gran fan suyo, y fíjate que se cargó a medio ejército japonés en la película “Arenas Sangrientas”.
También se le acusó de machista por películas como “El hombre tranquilo”, si bien en realidad fue defendido de estas acusaciones por actrices como Lauren Bacall, Angie Dickinson o Maureen O’Hara, grandes amigas suyas.
Otra acusación fue la de homofobia, totalmente injusta, pues fue un gran amigo de Rock Hudson, antes de que fuera vox populi su homosexualidad, Wayne ya lo sabía, y no por ello dejaron de tener una estrecha relación.
Por último, se le tachó de fascista. Para esto sus detractores tienen pruebas de peso, lo reconozco, como la película que hizo a favor de la guerra de Vietnam, “Boinas Verdes”. Para Wayne, la guerra de Vietnam era imprescindible para detener el comunismo. Wayne era un militante muy activo del partido republicano, cierto, pero lo que mucha gente no sabe es que se enfrentó a su propio partido cuando Estados Unidos debatió si devolver o no el Canal de Panamá a los panameños. Los demócratas iban a votar que sí se les devolviera el control, y los republicanos que no, para que el canal siguiese bajo dominio americano. Pero John Wayne pensaba que Panamá tenía derecho a controlar su canal así que convenció a varios senadores republicanos para que cambiaran su voto. De ese modo, la votación la ganaron los demócratas, y el entonces presidente Jimmy Carter, del Partido Demócrata, le dio las gracias a John Wayne, públicamente.
Resumiendo, que veáis Río Bravo, que os va a encantar , y que no todo es negro o blanco, hay matices....